El Basset leonado de Bretaña desciende en línea directa del Grand Fauve, antiquísima raza de rastro, hoy casi completamente desaparecida que era utilizada para la caza del zorro y del jabalí, sobre todo en el sotobosque más tupido. De su progenitor ha conservado las cualidades de excepcional cazador y su fogosidad que, a menudo, es frenada con cruzamientos con el Basset Vandeano. Todavía hoy es bastante común en Bretaña, apreciado por sus cualidades naturales y por su perfecta adaptación al paisaje, duro y accidentado de aquella zona. Fuera de los confines regionales, es muy difícil encontrarlo, resultando prácticamente desconocido fuera de Francia.